Posibles surcos para trazar nuevas rutas hacia la educación diferenciada, liberadora y democrática. Tendremos la oportunidad de compartir ideas, debatir y crear nuevos acercamientos sobre la educación, como acto político y con capacidad transformadora.
"Para Levinas la adaptación del Otro a lo Mismo no se obtiene sin violencia, es reducir lo múltiple a la totalidad. Podría decirse que reducir al Otro a mí mismo es no solo violencia sino que dominación, es ejercer sobre el Otro un poder indebido y arbitrario, es en definitiva, aniquilar la diversidad subsumiéndola a la homogeneidad."
"La
diversidad presupone cuestionar el conformismo, las asimetrías sociales y
también las injusticias. En este sentido, el mensaje de la diversidad no es
neutro. Asumir la diversidad como relación significa, por de pronto, aceptar la
inter y multiculturalidad como un nuevo paradigma de organización social en
donde conceptos como la responsabilidad social, la ciudadanía activa, el
empoderamiento, la participación ciudadana, la democracia deliberativa se
redefinen y se vigorizan." -Abraham Magendzo en Alteridad y diversidad: componentes fundantes de la educación en derechos humanos, pág. 78 y 80
Ojo con las miradas: Posibles implicaciones de nuestra concepción del ser humano
La mirada es cosa seria.
Cómo entendemos al Otro, tiene grandes implicaciones sobre nuestro
comportamiento social. Los sistemas económicos, políticos y culturales nos
ofrecen pistas para conocer cuáles son las concepciones sobre el ser humano y
como éste participa o no en sociedad. Aunque podría detenerme en varios
aspectos, centraré mis palabras sobre la educación como derecho. Anticipo que está reflexión será breve, ya estaremos
conversando sobre este tema en otras reflexiones.
Abraham Magendzo, Coordinador
de la Cátedra UNESCO de Educación en Derechos Humanos de la Universidad
Academia de Humanismo Cristiano y miembro integrante de la Unidad de Currículum
y Evaluación del Ministerio de Educación en Chile. En un artículo titulado “Alteridad y diversidad: componentes
fundantes de la educación en derechos humanos” expone:
“No hay
posibilidad de respetar los derechos de otro u otra si este o esta no es
reconocido o reconocida en su alteridad, como un legítimo otro u otra.”
(2004, p. 73).
A pesar de que el derecho a
la educación ha sido ampliamente reconocido en la Declaración Universal de los
Derechos Humanos (1948, Art. 26), el Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales (1976, Arts. 13 y 14), y en la Convención de
Derechos de la Niñez (1986), entre otros, este derecho continua siendo vulnerado
para muchas y muchos, específicamente para la niñez y las adolescencias con
capacidades diversas. La vulneración del derecho a la educación es evidente,
desde el pleito de clase de Rosa Lydia Vélez (1980) hasta el presente, niños,
niñas y jóvenes en Puerto Rico están desprovistos de los servicios educativos
necesarios para su desarrollo óptimo. El Departamento de Educación (DE) es la
agencia de gobierno con la tarea magisterial de proveer las condiciones
necesarias para el disfrute del derecho a la educación, no obstante, los
escollos son de inmensas proporciones. Desde nombramientos tardíos de
facilitadores y asistentes, escasez de educadores en el área de educación
especial y problemas en la contratación de servicios relacionados con terapias,
entre otros. Una muestra representativa de estas problemáticas han quedado
plasmadas en la prensa del país, por ejemplo:
Sin embargo el derecho a la educación, podría
entenderse por medio de dos dimensiones: la educación como responsabilidad
ético-política del Estado y la sociedad; y la segunda la educación como derecho
humano indispensable para el desarrollo humano (Arias, Ayala y Díaz, 2011). Si
pensamos la educación puertorriqueña a través de éstas dimensiones, mucho nos
queda por mejorar. La responsabilidad ético-política del Estado no termina con
la creación de leyes o la construcción de nuevas escuelas. Dicha responsabilidad
debe trascender cuatrienios y partidos políticos, requiere de una profunda
comprensión y respeto hacia los derechos humanos y en específico a la
diversidad como manifestación humana. Retomando las palabras de Magendzo, ¿acaso
la vulneración de los derechos de la niñez y juventud con capacidades diversas
en Puerto Rico está relacionada con la negación a la diversidad, con la
ausencia del reconocimiento de la Otra y el Otro como legítimos? Existen un
sinnúmero de cargas y prejuicios relacionados con la diversidad, los conceptos
utilizados históricamente como minusválidos, impedidos, discapacitados,
anormales, entre otras, han teñido de discriminación el tejido social. Además,
el sistema económico enfocado en la oferta y demanda ha margina a quienes no “pueden”
insertarse en la economía del consumo y producción. Es necesario un salto
cualitativo, un re-enfoque de la mirada sobre la humanidad como conjunto.
Reconocer en la alteridad es
para mí llevar a la práctica lo que teóricamente hablamos de respetar los
derechos humanos y la diversidad, es reconocer la existencia del Otro como
parte constituyente de nuestro ser. Podríamos comenzar transformando nuestras
palabras, nombrando o refiriéndonos hacia los demás con respeto. No me parece
necesario etiquetar o clasificar a nuestros estudiantes en categorías de “regular”
o “especial”, ni siquiera estoy de acuerdo con separar la educación entre una
de “corriente regular” y otra “especial”. El derecho a la educación es para
todas y todos por igual, irrespectivamente de nuestra diversidad. La garantía
de nuestro desarrollo humano no puede depender de la ubicación escolar o
social. Les invito a considerar el derecho a una educación diferenciada y
apropiada, que atienda de manera adecuada nuestras necesidades, las de todas y
todos. Somos diferentes, pero iguales en derecho. Lo que implica que nuestra
mirada a la educación está obligada a diferenciar, a respetar a cada ser en sus
fortalezas y retos.
Les invito a considerar las
escuelas como “academias de especialistas”, donde la niñez y la juventud son
creadores y colaboradores en el proceso de enseñanza-aprendizaje. A
continuación comparto un maravilloso trabajo realizado por el dibujante Miguel
Gallardo y la Fundación Orange. El vídeo Academia
de Especialista tiene como propósito provocar un cambio de paradigma,
eliminar el acercamiento hacia la niñez y juventud con autismo, con síndrome
down, con riesgo al fracaso, por un acercamiento hacia sus fortalezas e
intereses.
Aquí les dejo:
Referencias:
Arias
Campos, R., Ayala Rengifo, M., & Díaz Meza, J. (2011). Reflexiones sobre el
derecho a la educación y sus perspectivas en el marco del desarrollo humano. Revista Lasallista de Investigación,
8(1), 117-125. Recuperado dehttp://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3786227
Fundación
Orange. (2012). Academia de Especialistas. [Vídeo] Recuperado de
http://autismodiario.org/2012/09/13/academia-de-especialistas-el-nuevo-cortometraje-de-miguel-gallardo-y-la-fundacion-orange-sobre-el-autismo/?subscribe=success#blog_subscription-2
Magendzo,
A. (Ed.). (2004). De miradas y mensajes a la educación en Derechos
Humanos. LOM Ediciones, Cátedra UNESCO Educación en Derechos Humanos,
Universidad Academia de Humanismo Cristiano, Chile.